Guía para adquirir un perro

Los perros juegan un papel muy importante en los hogares de casi todo el mundo. Tu experiencia personal al ser dueño de una mascota te será muy agradable si consideras cuidadosamente qué perro se adaptará mejor a su familia, tu casa, y estilo de vida. La razón principal de que las mascotas sean abandonadas en albergues para animales se debe a que las expectativas no se cumplieron satisfactoriamente, así que debes tomar una decisión acertada. Toma tu tiempo, incluye a tu familia, y presta una cuidadosa atención a las siguientes preguntas cuando consideres adquirir un perro como mascota.

El dicho “el perro es el mejor amigo del hombre” tiene mucho de cierto. Los perros han sido compañeros fieles del ser humano por más de diez mil años. Son amistosos, afectuosos, y divertidos. Ellos también son capaces de realizar trabajos  extraordinarios y aparentemente les gusta hacerlos.

Los perros se han reproducido selectivamente por muchas generaciones para resaltar los rasgos físicos y aspectos de comportamiento específicos. La diversidad asombrosa de los perros incluye tamaño variado, longitud de pelaje, color, temperamento, y diferentes niveles de actividad. El tamaño de un perro puede afectar su longevidad: la vida del perro de raza grande tiende a ser más corta que la de un perro de raza pequeña.

Algunos perros pueden tener un riesgo mayor hacia ciertas condiciones médicas, mientras que otros pueden requerir mucho más entrenamiento, ejercicio y paciencia para ayudarlos a que se vuelvan buenos compañeros. Consulta con tu Veterinario acerca de la condición de salud y el comportamiento que pueden ser característicos de la raza que estás considerando adquirir.

Como dueño, serás el responsable de proporcionar la alimentación, albergue, compañía, ejercicio, y salud física y mental del perro y esto por toda la vida del animal. Si bien las familias deben involucrar a sus niños para que cuiden a la mascota, los jóvenes necesitan la ayuda de un adulto que esté dispuesto, sea capaz, y disponga del tiempo necesario para supervisar el cuidado diario de la mascota.

La alimentación, el aseo, el ejercicio y las necesidades fisiológicas habituales de eliminación (defecar y orinar) son necesidades diarias que deben ser consideradas para mantener a un perro sano y feliz.

Piensa sobre los siguientes factores al decidir si debes adquirir un perro y para determinar qué raza será la más apropiada para ti y tu familia:

• ¿Vives en una ciudad, en una zona residencial de la periferia, o una zona rural?

• ¿Alquilas o eres dueño de la casa?

• ¿Vives en un apartamento de renta o en una residencia propia?

• ¿Vives en la planta baja o en el piso 21?

• ¿Cuántas horas trabajas durante el día? ¿Frecuentemente tienes algunos compromisos después del trabajo que interfieran

con el cuidado de tu cachorro o perro?

• ¿Viajas a menudo?  ¿Quién cuidará al perro en tu ausencia?

• ¿Tienes otras mascotas?

• ¿Existen restricciones en el número o tipo de mascotas dónde vives?

• ¿Qué cambios futuros podrían ocurrir en tu situación actual que podrían afectar tu disponibilidad para cuidar durante los próximos años a tu perro?

• ¿Haces citas para el mantenimiento del aseo de su perro? ¿El aseo se lleva a cabo en tu hogar o en un centro profesional de

estética?

• ¿Qué características buscas en un perro, por ejemplo, un compañero para correr o caminar en el campo, un perro cariñoso

de compañía, o un compañero con mucha energía?

Los cachorros requieren tiempo extra para ser educados en tu casa, socialización, y entrenamiento de obediencia, así como

alimentación más frecuente, ejercicio, y supervisión. Considera la posibilidad de obtener un perro adulto; a menudo las mascotas adultas ya han sido entrenadas para convivir en el hogar, obedecen algunos mandatos básicos, y usualmente se adaptan muy bien a su nueva casa.

Los perros grandes requieren más espacio que los pequeños, y pueden ser más difíciles de mantener en un apartamento o piso. Sea cual sea el tamaño de tu perro, debes proporcionarle acceso al aire libre varias veces al día para satisfacer sus necesidades fisiológicas habituales como orinar, defecar y hacer ejercicio.

El precio de compra de un perro puede variar enormemente debido a la raza y lugar de compra, y la adquisición es sólo el gasto inicial de un perro. Los perros necesitan alimentos balanceados y de alta calidad, un albergue adecuado, estímulo mental (por ejemplo, juguetes, tiempo para jugar), y visitas frecuentes al veterinario para un programa de salud preventivo. Otros gastos pueden incluir tratamiento médico veterinario de emergencia, aseo, lugar para alojamiento, identificación, registro, castración del macho o esterilización de la hembra, entrenamiento, y accesorios. Si existe un seguro de salud adecuado podrá ayudar a pagar los gastos inesperados como resultado de enfermedades o lesiones.

Los perros de raza pura pueden ser adquiridos de criadores con buena reputación. Tanto los cachorros de raza pura como los

perros mestizos pueden ser obtenidos de albergues municipales y en organizaciones de rescate de animales. En muchas comunidades hay sitios de rescate dedicados a encontrar un buen hogar tanto para razas caninas específicas como de sus cruces (mestizos). Si es posible, investiga lo más que puedas sobre la personalidad del perro y el porqué fue abandonado para adopción.  Algunos cachorros o perros adultos son abandonados debido a los cambios de estilo en la vida familiar (por ejemplo, mudanza, un nuevo bebé, etc.), pero algunos son abandonados debido a problemas de comportamiento que posiblemente no sean aceptables para ti.

Un perro sano debe tener los ojos lúcidos, resplandecientes; el pelaje limpio y brillante y no debe verse demasiado delgado, ni demasiado gordo, o mostrar señales de enfermedad, como descarga nasal o diarrea.

Al escoger un perro, elige uno que sea activo, amistoso, curioso, y que no te tenga miedo. El perro debe aceptar el manejo

amigable y no debe mostrar señales de agresión. El temperamento de los padres de un cachorro puede ser una indicación de su propio comportamiento en el futuro.

Antes de traer a tu nuevo perro al hogar, prepárale un lugar apropiado para comer y dormir y ten listos los accesorios necesarios como un collar y correa, placa de identificación, comida, y un recipiente para agua de beber. Cerciórate de que tu casa sea a prueba de mascotas para prevenir lesiones a tu perro o daños a tus pertenencias. Por ejemplo, asegúrate de que los cables eléctricos y cordones estén fuera del alcance de bocas curiosas. Pregunts a tu Veterinario sobre varias formas de convertir su casa en un lugar seguro para su mascota.

Lo más pronto posible, programa un examen veterinario para evaluar la salud de tu nuevo compañero y así asegurar que reciba las vacunaciones apropiadas y cualquier recomendación para el cuidado de la salud. Si cuentas con información sobre la salud del perro proporcionada por el dueño anterior de la mascota, incluyendo la historia de vacunación y de desparasitación, asegúrate de llevar contigo esta información en la primera visita al Veterinario.

Si adoptas un cachorro, debes prepararte entre algunas semanas a varios meses para el entrenamiento en tu hogar y algunos gastos iniciales para exámenes de salud, vacunaciones y castración del perro o esterilización de la perra. Si planeas la llegada del cachorro con tiempo suficiente, el entrenamiento y socialización en su hogar, tu cachorro aprenderá más rápidamente y probablemente cuando se desarrolle y sea un perro adulto, tengas lo que siempre has deseado. Si tu comunidad ofrece clases de entrenamiento para cachorros, ésta es una forma ideal para socializar a tu nuevo compañero y así ayudarlo para que aprenda algunas órdenes básicas. Proporcionar de manera temprana en la vida del cachorro contacto frecuente y positivo con personas y otros perros mejorará sus interacciones futuras con la familia, otras personas, y otros perros que ya pueda tener.

Cualquier perro puede estar aburrido y potencialmente puede llegar a ser destructivo si se le deja encerrado durante el día sin que pueda realizar algo de ejercicio que satisfaga sus necesidades exploratorias, y sociales. Por lo tanto, diariamente dedica algún tiempo a actividades que sean divertidas para ti y tu perro, como caminar, jugar, acariciar, programa de aseo, etc. Recuerda que los perros son criaturas muy sociables, y el abandono de un perro en el patio trasero sin que tenga interacción es una de las peores cosas que le puedes hacer.

Cuando adquieres un cachorro o un perro aceptas la responsabilidad por la salud y bienestar de otro ser vivo. Tú también eres responsable por el impacto que tu mascota pueda tener en tu familia, amigos y comunidad. Una mascota será parte de tu vida durante muchos años. Invierte el tiempo y esfuerzo necesario para hacer que los años que paseis juntos sean muy felices.