He conocido numerosos casos de perros ladradores, cuyos propietarios se han visto en la tesitura de abandonar a su perro por no poder tenerlo a causa de las molestias a los vecinos, propietarios a quienes les han llegado multas sustanciosas por molestias vecinales, y hasta propietarios que han visto cómo su perro ha sido envenenado por algún vecino al no soportar los ladridos excesivos.
Como he comentado anteriormente, un perro desequilibrado tenderá a ladrar constantemente. Este tipo de ladrido no es un ladrido de aviso, de amenaza o de vigilancia, es un ladrido de ansiedad. Normalmente se da en perros que pasan muchas horas dentro de un piso, casa o terreno en ausencia de sus propietarios. Es un ladrido que llega a ser insoportable puesto que es monótono y muy repetitivo. Muchos dueños afirman no haber oído a su perro ladrar, comentando a sus vecinos que el perro no es ladrador: haz caso a tus vecinos si recibes la queja de que tu perro ladra en tu ausencia.
Es un problema que tiene solución, dependiendo de la gravedad del mismo. Si tienes un perro ladrador, te sugiero que sigas mis recomendaciones. Dado que el ladrido excesivo es fruto de una carga de ansiedad que es liberada a través del ladrido:
- Cada mañana, antes de abandonar tu casa para ir al trabajo, sal con tu perro a pasear mínimo 45 minutos. Este paseo matutino debe constar no solo de un paseo tranquilo, sino de un tramo en el que el perro corra y juegos varios. Intenta ir a un parque o zona amplia donde puedas lanzar cosas a tu perro: se trata de que tu perro pueda quemar toda la energía que ha acumulado durante la noche. Cuando te vayas al trabajo, el nivel de ladrido se reducirá notablemente.
- Hazte con 3 juguetes, no más. La acumulación de juguetes es perjudicial para tu perro, por lo que hazte con dos juguetes que tu perro adore, y un Kong. El Kong es un dispositivo que entretiene mucho a los perros, lo que permitirá que tu perro se entretenga durante horas con el Kong, evitando ladrar.
- Nunca te despidas de tu perro cuando vayas al trabajo. Parece una tontería pero el simple hecho de decir «adiós» u otra forma de despedida de tu perro, él ya lo asocia con algo negativo, por lo que vete sin decir nada.
- Habla con algún amigo o familiar para que visite tu casa a media mañana si vas a estar más de 4 horas fuera de casa. Los perros adoran la compañía y no soportan la soledad, por lo que una visita le vendrá de maravilla.
- Haz un seguimiento del comportamiento de tu perro con ayuda de tus vecinos: infórmate de si va ladrando más o menos, etc.
- Si ninguna de estas pautas funcionan, puedes hacerte con dispositivos de ultrasonido pero, ojo con el dispositivo que elijas, puesto que hay numerosos mecanismos antiladridos, sobretodo collares, que dañan al perro. Me informaré de algún dispositivo que logre mi confianza y os pueda recomendar.
Sé perseverante con la educación de tu perro y lograrás grandes resultados.
