Llega un momento en la vida de algunos perros en el que no queda otro remedio que tomar la más dura decisión de la vida de la mascota: despedir el perro mediante una inyección letal.
Aunque jamás querríamos encontrarnos con este momento, muchos propietarios deben enfrentarse a esta situación, porque lo último que queremos es que nuestro perro sufra.
Debemos pensar que, afortunadamente, podemos ayudar a nuestro perro a morir en paz, sin más sufrimiento y dolor.
Eutanasia en perros
Es sabido que, por temas religiosos o morales, en la mayoría de países del mundo no se permite la eutanasia humana.
No tenemos la opción de decidir, sencillamente, debemos acatar que si el destino nos depara un final lleno de sufrimiento y dolor, a nosotros o a nuestros seres queridos, deseamos que ese tiempo pase lo más rápido posible.
Afortunadamente, podemos decidir con nuestros peludos, y les podemos evitar un final que no se merecen.
Ten por seguro que será una de las decisiones más duras que vas a tomar en tu vida el día que se presente, pero ármate de valor, piensa en todo el amor que le has dado a tu perro y despídete de él como se merece.
La eutanasia en perros
Hay muchas dudas sobre la eutanasia del perro, y vamos a aclararlas en estos siguientes puntos:
Hay varios tipos de eutanasia
La más habitual es la anestesia intravenosa. Consiste en la inyección de una dosis alta de pentobarbital o Tiopentato de sodio.
Para ello, se seda al perro, y cuando ya está inconsciente, el animal deja de respirar y el paro cardíaco llega rápidamente, en unos 30 segundos.
Es una técnica rápida y provoca una muerte dulce y tranquila.
Otro tipo de eutanasia es por anestesia inhalada e inyección cardíaca o intraperitoneal, aunque éstas son menos comunes.
La eutanasia canina debe practicarla un veterinario
Solamente este profesional podrá aplicar la eutanasia con total garantía de que nuestro perro muera dulcemente, simplemente, quedándose dormido.
Este mismo profesional comprobará que, efectivamente, la muerte se ha llevado a cabo y ya podrás dar descanso a tu perro enterrándolo o incinerándolo.
Solamente el veterinario, podrá confirmar y verificar que tu perro debe ser sacrificado
El objetivo es acabar con el sufrimiento y el dolor del perro debido a una enfermedad o accidente que no puede mejorar su calidad de vida.
Se toma esta decisión sobretodo en enfermedades tan crueles como el cáncer.
Ten la total garantía de que tu perro no sufrirá en absoluto durante la eutanasia
De hecho, los veterinarios la consideran la muerte dulce, porque tu perro se quedará dormido y será ajeno a lo que pase a su alrededor.
También ten por seguro, que sentirás una contradicción de emociones cuando tomes esta decisión
Tendrás la seguridad que es lo mejor que podrás hacer, sin embargo, se apoderará de ti una tristeza infinita.
Te invito a que leas los consejos para superar la muerte de tu perro.
Llora todo lo que tengas que llorar.
Lo positivo de todo esto, es que podrás despedirte de tu peludo, incluso, podrás estar con él, acompañándole mientras se queda dormido, siendo lo último que vea en su vida.
Cuándo practicar la eutanasia en el perro
La eutanasia canina solo debería llevarse a cabo para evitar que el perro sufra. Si no hay sufrimiento, jamás debería practicarse.
Por desgracia, la eutanasia también se practica para deshacerse de perros abandonados, perros agresivos o camadas indeseadas de cachorros.
¡Esteriliza siempre y evita camadas! Solamente así, podremos salvar a muchos perros sin hogar y utilizar la eutanasia con el único fin de acabar con el sufrimiento de nuestros peludos.
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