Un milagro fue encontrar a Jordan, un cachorro de pocos meses de edad, que algún despreciable ser humano echó al canal de un río, aún con vida, no sin antes haberle amputado una pierna, para dejarlo morir solo…
La asociación Hope for Paws, que se encarga de rescatar a perros en lamentables situaciones, recibió la llamada de una persona que vio cómo un cachorro de perro apenas se movía sobre un paquete vacío de patatas para resguardarse del agua del río que cruza por la ciudad… Ahí estaba: totalmente desnutrido, soportando un dolor inimaginable de su pata amputada, con sarna y lleno de parásitos…
Ni sus mismos rescatadores tenían mucha esperanza en poder salvarlo, ya que no podían trabajar con la pata amputada sin cirugía… y una cirugía no la iba a soportar dado su débil estado de salud. Sin embargo, Jordan quería vivir.
Es imposible no llorar viendo este vídeo.
Afortunadamente, quedan personas a quienes no les importa si el perro está enfermo, sordo o le falta una pata. Hay personas que pueden ver más allá de cualquier defecto, ven el amor puro que puede llegar a dar un perro, sea como sea. Y Jordan, es un claro ejemplo de ello.
En la actualidad, Jordan vive en una casa de acogida a la espera de ser adoptado por una familia que le cuide como se merece. Mientras, disfruta cada segundo del día como si fuera el último.
Así como hay personas inhumanas, también hay personas llenas de humanidad. Esas personas son las que salvan a cachorros y perros como Jordan. Un ejemplo a seguir por cada un o de nosotros.
