A pocos días para que demos la bienvenida al verano, muchas personas optan por pasar más tiempo con sus perros fuera del hogar para disfrutar de los días soleados.
Esta mayor exposición de nuestra mascota al aire libre hace que sea necesario extremar las preocupaciones ante la presencia de los parásitos externos.
Aunque están siempre presentes en nuestra zona climática, las pulgas, las garrapatas y los mosquitos, que son los principales transmisores de la Leishmaniosis (enfermedad causada por la infección de un perro debida al parásito Leishmania infantum), son parásitos que proliferan en los meses estivales, por lo que el riesgo de que tu mascota contraiga cualquier tipo de enfermedad aumenta exponencialmente.
Mantener una rutina higiénica adecuada es un aspecto esencial para evitar problemas con los parásitos externos.
Los hábitos cotidianos, como el cepillado diario, ayudan a encontrar y eliminar parásitos, así como a detectar a tiempo cualquier síntoma de alguna infección, ya sea un pequeño bulto, una herida o una marca.
Más allá de la higiene, existen distintos productos antiparasitarios para perros en el mercado para proteger al perro contra pulgas, garrapatas o mosquitos, ya que, aunque son parásitos diminutos, pueden dañar seriamente la salud de tu mascota.
Las pipetas para perros son el producto preferido por los propietarios para la prevención de las pulgas, las garrapatas y los mosquitos.
Estas pequeñas ampollas con líquido activo en su interior ofrecen una gran rapidez de acción frente a un amplio espectro de parásitos externos del perro.
En función de la marca comercial, cada pipeta contendrá unos determinados principios activo, aunque en la gran mayoría de las presentaciones se encuentran insecticidas como el fipronil, la permetrina y el metopreno.
Las pipetas ofrecen una excelente protección ya que, no solo previenen al perro frente a los parásitos externos, sino que también los mata.
La aplicación de las pipetas para perros es realmente sencilla.
Tan solo hay que abrir la caja, extraer la pipeta y aplicarla sobre la mascota.
Para su administración es fundamental separar el pelaje por la línea dorsal del perro y colocar la punta de la pipeta directamente sobre la piel.
Posteriormente, basta con apretar la pipeta, aplicando aproximadamente la mitad del contenido de la ampolla a mitad del cuello entre la base del cráneo y los omóplatos para que sus principios activos se extiendan por todo el cuerpo a través de la capa grasa de la piel.
Con estos sencillos paso, tu perro estará protegido frente a los parásitos externos.
¿Cuánto tiempo dura el efecto de las pipetas para perros?
El efecto de las pipetas para perros se prolonga aproximadamente unas cuatro semanas.
De esta forma, debe volver a aplicarse cada 30 días para asegurarnos de que la mascota está completamente protegida.
A pesar de ello, la duración del efecto dependerá de la marca comercial, el tipo de producto y el tipo de perro (raza, tamaño, edad, etc.).
Las pipetas deben emplearse durante todo el año y, especialmente en verano, ya que es la época donde más se reproducen los parásitos.
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