La ingesta de heces por parte de un perro cuando es cachorro es algo muy común y por lo que no debemos preocuparnos, sin embargo, ya en la etapa adulta, un perro no debería ingerir heces, por eso hoy, trataremos este tema que tanto preocupa a los propietarios de perros que han podido ver con sorpresa y repugnancia esta actividad en su mascota.
Un perro adulto sano y equilibrado no debe por qué comer heces. Cuando un perro adulto ingiere haces, ya sean propias o ajenas, estamos ante un problema, pero para averiguarlo y poner solución debemos analizar las razones que llevan a un perro a tener este comportamiento.
La ingesta de heces tiene el nombre de coprofagia. La copofragia puede llevarse a cabo de tres formas:
- Que el perro coma sus propias heces.
- Que el perro coma las heces de otros perros.
- Que el perro coma las heces de otras especies: humanas, gatos, etc.
Dependerá del tipo de heces que ingiera para averiguar el tipo de problema que sufre el perro. Analicemos las causas:
- Hay perros que comen sus heces por varias razones entre las que destacan el hambre. Este problema tiene muy fácil solución. Y no, no pienses que solo aumentando la cantidad arreglarás el problema. Si un perro tiene hambre no es por la cantidad, sino por la calidad del alimento. Un alimento sin nutrientes, que es propio de piensos o croquetas de baja calidad, llevará a que el perro pase hambre y que lleve a comer sus heces. En este sentido, apuesta por alimento de calidad que asegure un alto nivel de nutrientes.
- Hay perros que comen sus heces porque les han regañado tantas veces por defecar en el sitio inadecuado, que para evitar que le riñan, limpia su zona comiéndoselas. ¿Es tu caso? También los hay que lo hacen por imitación. Han podido observar cómo el dueño tras una evacuación han limpiado su caca, y ellos hacen lo mismo limpiándola a su manera (aunque estos casos son pocos).
- Hay perros que comen las heces de otros perros más dominantes. Esto es muy común, sobretodo en perros que conviven juntos y comerse las heces del perro más dominante es una señal de sumisión del perro que ingiera hacia el dominante.
- Cuando un perro ingiere las heces de otras especies, puede ser por dos motivos: un motivo es el aprovechamiento de nutrientes (recordemos que apostar por comida de calidad es la solución) y el otro motivo es que sencillamente le gusta el sabor.
- El aburrimiento, el hastío, la ansiedad, la soledad y la falta de atención pueden llevar al perro a ingerir heces.
- No podemos descartar tampoco los problemas médicos. Una pancreatitis o una infección intestinal puede llevar al perro a ingerir heces. En este caso, una visita al veterinario puede solucionar el problema rápidamente.
La ingesta de heces no solo es una conducta repugnante para nosotros (recordemos que los perros no tienen el sentimiento o emoción de asco) sino y sobretodo es un peligro para el animal que las ingiere: hay peligro de infección por parásitos o bacterias que pueden a llevar a complicaciones graves en la salud de nuestro peludo.
¿Cómo solucionarlo?
- Aporta a tu perro una alimentación nutritiva. No solo lo alimentes, nútrele.
- No dejes solo a tu perro durante muchos horas y apórtale el ejercicio físico suficiente para que agote su energía. Actividad física y divertimento es imprescindible en la vida diaria de un perro.
- Mantén limpia la zona donde está tu perro. Si tu perro vive en el jardín, pero no recoges sus heces y el jardín se vuelve un campo de minas… es normal que el perro se las coma para limpiarlo.
- Altera el sabor de las heces para evitar que no vuelva a comer más. Una mala experiencia con picante o productos que se venden en las tiendas de mascotas llevará al perro a no querer probar una caca más en su vida.
- Para casos muy graves, utiliza el bozal durante el paseo mientras tu perro está en tratamiento antiheces.
