Hay historias que ponen los pelos de punta y esta historia es de película pero con final feliz. La historia de Luna bien podría tratarse de ciencia ficción porque lo suyo ha sido un milagro.
Esta mestiza de Husky y pastor Alemán de 18 meses había salido a navegar junto a su dueño con un barco para ir pescar frente a la costa de San Diego. En un momento dado, su dueño, Nick Haworth, empezó a ponerse nervioso porque no veía a Luna por ningún lado del barco. La buscó incansablemente hasta que no hubo dudas: la perra había caído al mar.
Nick la buscó sin descanso durante dos días con la ayuda de personal de la marina, por mar y por tierra, incluso en la islas que se encuentran ante las costas de San Diego sin noticias de la perra.
Diez días después de su desaparición, su dueño perdió las esperanzas y la dio por muerta. Lo más seguro es que hubiera muerto ahogada si no sabía dónde ir, o del cansancio. Nick, incluso compartió fotos de Luna en Facebook con el mensaje «RIP Luna». Sin embargo, la sorpresa fue mayúscula cuando localizaron a la perra sentada al borde de una carretera de una de las islas. ¡Luna había nadado hasta tierra firme como una campeona! Hablamos de un mínimo de 3 kilómetros a nado, ¡impresionante!
Probablemente, la mascota no pasó más de un día en el agua. La encontraron sentada al borde de una carretera en la isla de San Clemente. La sorpresa de su propietario no pudo ser más grande cuando le comunicaron la increíble noticia. Sin podérselo creer, recogió a Luna y le dio los mayores de los abrazos. No hay duda de que esta historia no la olvidará jamás.
La duda que nos queda a nosotros es, ¿volverá Nick a llevarse a Luna de pesca con su barco?