Los días de lluvia se convierten en una pesadilla a la hora de salir con nuestro perro a pasear: patas mojadas y sucias, pelo mojado, frío, … y cuando llegamos a casa, las sacudidas del perro nos los ponen todo perdido.
Muchos propietarios deciden no salir los días de lluvia con el fin de evitar todos estos problemillas: si alguna vez te ha pasado te darás cuenta del nivel de ansiedad que llega a desarrollar tu perro aunque no salga durante un día. En efecto, no es nada aconsejable dejarlos en casa encerrados, privándole de su rutina diaria, sobretodo en aquellos perros de energía alta.
Debes saber que debes respetar las rutinas, llueva, truene, nieve o haga viento. Los perros no tienen ningún problema en enfrentarse a condiciones climatológicas diferentes a las de un día despejado, por tanto, hoy voy a darte algunos recursos para afrontar un día de lluvia con tu perro:
- Paraguas para perro: ya lo ves en la foto. Se trata de una correa especial que lleva un paraguas incorporado y que consigue mantener a tu perro seco de la molesta lluvia. Es cómodo y muy práctico.
- Impermeable para perro: se trata de un chubasquero o impermeable para perro muy fácil de poner y que permite mantener totalmente seco a tu perro durante todo el paseo, de forma que evitarás esas dichosas sacudidas una vez se encuentra en un lugar seco, intentando zafarse de la humedad.
- Botas de lluvia para perro: si hay algo que molesta cuando llegamos a casa los días de lluvia es dejarlo todo perdido con huellas de barro. Por eso, existen las botas de lluvia para perro, en diferentes modelos, tallas y colores. Se colocan solo durante el paseo y son muy prácticas para mantener las patitas secas y protegidas de la humedad y el frío.
Si eres de los propietarios que prefiere salir a pasear sin usar ninguno de estos recursos dejando que la naturaleza siga su curso, puedes seguir estos consejos:
- Ten preparada una toalla seca para poder secar a tu perro antes de acceder al hogar, incidiendo en sus patas. Una vez en el interior, utiliza el secador para eliminar la humedad hasta dejar a tu perro completamente seco, de esta manera, podrás evitar que se produzcan resfriados o dermatitis.
- Ten siempre toallitas húmedas de bebé para limpiar las patas antes de secarlas con la toalla seca, de esta forma, evitarás que la toalla se ensucie y con esa misma suciedad sigas secando a tu perro empeorando la situación.
De una forma u otra, elige zonas para pasear diferentes a las habituales: decántate por suelos sin tierra y espacios cubiertos que estén más resguardados de la lluvia y, ¡feliz paseo!
Excelente Articulo! Lo compartiré